Mi abuelo nació en Córdoba y trabaja desde pequeño. Y todavía trabaja. Ha estado trabajando desde los 7 años, hasta ahora. Me río mucho con él, es muy gracioso y se inventa unas coplas muy divertidas. Su cumpleaños lo celebramos en el Bar de mi tío Antonio y le manché la nariz con la tarta y luego jugamos al futbolín com Mirian, Soraya y mi hermano Juampe. Después nos hicimos fotos, nos pegamos un atracón sobre todo las culetas y los chuletones.
Se llama Alberto, como mi hermano pequeño, me decía"Vamos a echar la siesta", y yo decía "no abuelo, que me duermo de día y me despierto de noche" y no me echaba la siesta. Trabajaba de albañil y de vareador. Os voy a contar una cosa que me pasó con él: me fui con mi abuelo a varear y me dejó dar a las olivas, después nos pusimos a recogerlas y las metíamos en un cubo y mi abuela estaba quitando las hierbas, las hojas y las aceitunas que estaban malas.
Mi abuelo me cuenta muchas historias y a mi abuelo no les gustaban los perros hasta que se murió Tor le dió mucha pena, sobretodo a mí tío y desde ese día les quiere, pero todavía les regaña. Cuando nacío mi hermano Alberto el pequeño, decidieron llamarle Alberto como mi abuelo y ahora es muy travieso. Y mi abuelo nos invitó a ir de vacaciones a un pueblo cerca de Marinador. Había dos playas: la de la Concha y la de Morro de Gos y conocimos a unos chicos, se hicieron amigos nuestros y nos invitaron a ir con los barcos. Mi abuelo compraba churros y nos los comíamos. Ha trabajado mucho en el bar, y todavía está trabajando.
Mi abuelo y mi profesor Ángel toman café todas las mañanas, hablan de muchas cosas. Bueno, me despido de todos vosotros hasta el próximo artículo.
¡Feliz año nuevo!
